Crew 187 Journalist Report 19JAN2018
Sol 07
The Martian
When we lived in Peru, Colombia, and Mexico, the days passed like simple hours where our biggest worries have no place on Mars. Since we arrived on this planet we realized that the food would be better than expected, in large part by our chef. But today in the morning we discovered that our bags and cans of food are disappearing faster and faster.
Although according to calculations we will manage to keep our stomachs almost full before having to return to home. If there is one thing we are sure of, it is that when we will be back in our home, we will have learned to value much more what we have because on Mars we take advantage of every grain of rice even the last. It is possible that in the next few days we use a system of tasks and chocolate exchange for food rations.
We know that with our provisions we can still give ourselves certain luxuries such as continuing to eat meat for six days, being able to make bread for another five and taking hot soups for the cold days that ahead.
We decided to divide the cupboard according to the food we can eat daily because, in fact, 80 percent of our conversations are about the food we could prepare and the desire for fast food we feel. The bascule already shows results in some of us.
The cold was also the protagonist in the seventh Sol. It seemed that the energy systems would not be enough to sustain us for the rest of this day and the next. According to mission control, there is a high probability that rain and snow will be present in the area, so in Sol 8 we prefer to stay in the habitat to continue with the projects.
After an episode of approximately two Earth hours, we have managed to recharge our fuel tank in order to maintain electricity in the habitat. Balance: two crew members bathed in diesel for what of course they took advantage taking their respective shower.
Without success, we have been able to achieve the goal of watching movies at night. “With faith” today we can watch some film accompanied by popcorn or canchita although at the time we are already listening to a sound coming from our stomachs so we wait for the culinary delights of the crew scientist.
A week away from this desert planet we prefer not to think about how classic and boring our routines may seem. We miss you Earth, but not so much.
LATAM II will continue to inform.
Tania Robles, MDRS Crew 187 Journalist
Sol 07
Misión rescate
Cuando vivíamos en Perú, Colombia y México los días pasaban como una sucesión de horas en donde nuestras mayores preocupaciones no tienen cabida en Marte. Desde que llegamos a este planeta nos dimos cuenta que la comida sería mejor de lo esperada, en gran parte por nuestros cocineros. Pero hoy por la mañana hemos descubierto que nuestras bolsas y latas de comida desaparecen cada vez más rápido.
Aunque según cálculos lograremos mantener nuestros estómagos casi llenos antes de tener que volver. Si de algo estamos seguros es que cuando estemos de vuelta en nuestro hogar es que habremos aprendido a valorar mucho más lo que tenemos porque en Marte hasta el último grano de arroz hemos aprovechado. Es posible que los próximos días se cree un sistema de trueque de tareas y chocolate a cambio de raciones de comida.
Sabemos que con nuestras provisiones aún podemos darnos ciertos lujos como seguir comiendo carne durante seis días, poder hacer pan durante otros cinco y tomar sopas calientes para los días fríos que se avecinan.
Decidimos dividir la alacena de acuerdo a la comida que podemos ingerir diariamente porque a decir verdad el 80 por ciento de nuestras conversaciones tratan sobre la comida que podríamos preparar y el deseo por la comida rápida que sentimos. La báscula ya presenta resultados en algunos.
El frío también fue protagonista en el séptimo sol. Parecía que los sistemas de energía no serían suficientes para mantenernos durante el resto de este día y el siguiente. Según control de misión existen grandes probabilidades de que la lluvia y nieve se haga presente en la zona por lo que en Sol 8 preferimos resguardarnos en el hábitat para continuar con los proyectos.
Luego de un episodio de aproximadamente dos horas terrestres hemos logrado recargar nuestro tanque de combustible para poder mantener la electricidad en el hábitat. Saldo: dos tripulantes bañados en diésel que por supuesto aprovecharon su respectiva ducha.
Sin éxito hemos podido cumplir el objetivo de ver películas por la noche. “Con fe” el día de hoy podremos mirar algún filme acompañado de palomitas o canchita aunque en estos momentos y escuchando un sonido proveniente de nuestros estómagos ya esperamos las delicias culinarias del crew scientist.
A una semana de abandonar este planeta desierto preferimos no pensar en lo clásicas y aburridas que podrán parecernos nuestras rutinas ahora. Te extrañamos Tierra, pero no tanto.
LATAM II continuará informando.
Tania Robles, MDRS Crew 187 Journalist